Actualmente es muy común que las aseguradoras usen la venta telefónica para contactar a sus futuros asegurados. Con este fin, firman contratos con entidades financieras, bancos u otro tipo de empresas para que éstos les faciliten los datos de sus clientes y luego, telefónicamente, puedan contactarse para ofrecer los seguros.
Si Ud. es cliente de algún banco o financiera es muy probable que reciba uno o varios llamados telefónicos con el objetivo de venderle un seguro del hogar, muchas veces con distintas denominaciones tales como seguro integral de vivienda, cobertura de electrodomésticos, seguros de incendio y robo de casas particulares, etcétera.
ADVERTENCIA: si está ocupado al momento del llamado, NO MANTENGA LA CONVERSACIÓN. Los vendedores telefónicos (también llamados telemarketers) están capacitados para publicitar el seguro de manera tal de hacerle sentir a Ud. que ya cuenta con el seguro, lo cual es una conducta abusiva. Sin embargo, NO ES ASÍ. ES IMPRESCINDIBLE QUE UD. ACEPTE, ES DECIR, QUE EXPRESE QUE REALMENTE QUIERE EL SEGURO Y QUE FIRME LA SOLICITUD DE SEGURO.
Si Ud. tiene tiempo para recibir el llamado con atención y la propuesta parece interesarle, dedique los minutos que sean necesarios para escuchar detenidamente al vendedor y sacarse todas las dudas que tenga.
NO COMPRE NADA POR IMPULSO.
Recuerde: todas las conversaciones telefónicas por las que se vendan servicios o productos deben ser grabadas en beneficio del consumidor. Si le quedan dudas sobre la conversación que Ud. mantuvo con el vendedor del seguro, EXIJA ESCUCHAR LA CORRESPONDIENTE LLAMADA.
Algunas aseguradoras se niegan a darles a sus clientes las grabaciones de las ventas, lo cual constituye una conducta abusiva.